martes, octubre 04, 2005

Participación Política II


Los jóvenes somos las personas que sin duda disfrutamos más de nuestras libertades. A ningún joven le hubiese gustado vivir los tiempos del golpe militar, aquellos tiempos donde teníamos que estar atentos al "toque de queda" y salir a bailar hasta una hora determinada, aquellos tiempos donde la cultura era escasa, no teníamos acceso a las diferentes tendencias musicales que se desarrollaban en Europa o Estados Unidos ya que contenían un mensaje contrario al conservadurismo de la dictadura.

Pero en los 90 la alegría llegó junto con una democracia que nos da plenas libertades civiles. Sin embargo, no las hemos tomado en cuenta. Como lo mencioné en el texto anterior, existe una baja participación política de los jóvenes y los políticos han hecho poco o nada para revertir esta situación. La campaña de inscripción en los registros electorales si bien incentiva a los jóvenes a hacerse parte de sus derechos civiles, no comparto la idea de que esta iniciativa del gobierno logre incentivar de manera efectiva la participación de los jóvenes, es decir, van a participar, pero una vez cada cuatro años aproximadamente.

Participación política según el reconocido filósofo político Gianfranco Pasquino es "aquel conjunto de actos y actitudes dirigidos a influir de manera más o menos directa y más o menos legal sobre las desiciones de los detentadores del poder en el sistema político o en cada una de sus organizaciones políticas, así como en su misma selección, con vistas a conservar o modificar la estructura del sistema de intereses dominante".
Esta definición nos hace reflexionar sobre de qué manera los jóvenes vamos a influir en las desiciones del sistema político. El panorama es totalmente desalentador, las demandas juveniles las lideran sólo unos pocos de los millones de jóvenes que existen, las ideologías e ideales se están extinguiendo (es solo ver las campañas electorales lideradas por el marketing) y la conformidad y pasividad transforma a una juventud más consumidora y menos ciudadana.

Es necesario que las organizaciones políticas se hagan las preguntas y reflexionen sobre ¿A dónde está el ideal democrático por el que lucharon miles de jóvenes para derrocar la dictadura militar? ¿Una democracia es democracia en donde las desiciones las toman sólo los políticos sin la participación ciudadana? ¿Los partidos políticos como canales de las demandas de la ciudadanía, están cumpliendo su verdadero rol? ¿Soñamos con una causa mucho más superior a la de nuestro alcance?